sábado, 26 de marzo de 2011

Rolling tobacco, Virgina blend


UL-TRA-JE que el Marlboro box salga 7 mangos. Cómo se te ocurre Massalin? Qué? me vas a pagar la quimio en 30 años? Eh!?
Bueno, no. El magro presupuesto de este querusa fumador – si bien es mayor a lo que gasta Canal 5 La Plata en escenografía – no da para más.
¿Dejamos de fumar entonces? Golazo. Mejoramos el cutis, la capacidad pulmonar, la presión arterial, cambiamos el Tabaco Rabanne por alguna otra fragancia y estiramos unos años la expectativa de vida. No.
No vamos a hacer nada de eso. No hicimos nada de eso.
El muy ratón se compra tabaco y papel y se arma sus cigarros, y todo para escamotearle unos centavos a las tabacaleras. Centavos que no me sobran.
Aplauso, medalla y beso para el tipo que inventó la maquinita para armar cigarrillos. Tiene que estar en el panteón de los grandes de la ciencia junto a Tesla, Darwin y Fleming (Ian, obvio. La penicilina se le hubiera ocurrido a algún otro perejil)
Pero desde una perspectiva distinta, el pucho armado tiene toda una imagen. Es así y te das cuenta.
Liarse el propio cigarro tiene una onda de tipo duro, de reo. Te da un estilo muy Philip Marlowe, de bajos fondos, de hombre que convive cotidianamente con la violencia, el crimen, la marginación y la ocasional prostituta portuaria, y no sólo no le da importancia sino que es su medio, su métier. Vive de eso, puede estar con la soga al cuello y no se amilana, tratando a sus captores con sarcasmo e irreverencia. Se la re banca.
Transmite una personalidad Humphrey Bogart, un tipo que pone el pucho en la barra y con una mano mata un montón de nazis mientras que con la otra mece un vaso de scotch cortejando a la sensual heroína del caso para después volver, limpiarse la sangre de la solapa y terminarse el cigarro.
Da una imagen muy Clint Eastwood. Hombre mal arreado, de pocas palabras y ojos entrecerrados. Curtida la piel por el sol, áridas las palmas del trabajo manual. Un tipo callado que habla sólo cuando tiene algo que decir. Nadie sabe mucho de su pasado, pero nadie pregunta. Un desconocido que todos esquivan pero lo miran con respeto e intriga. Un tipo parco pero interesante que las mujeres saben que involucrarse significa riesgo y un seguro corazón roto, y sin embargo no se pueden resistir.

Pero no, sigo siendo el mismo nabo de siempre.




No crea una imagen, sólo hace cigarrillos... BARATOS!

3 objeciones:

Anónimo dijo...[Reply to comment]

Le posteo anonimamente y sin acentos, y le digo: NO AL ACUERDO DE RECIPROCIDAD.
Postee como la gente y ganara mas generosos comentarios, recuerde que al vida es dar y recibir, dar y recibir, dar y recibir... (no al reves viejo!).

Anónimo dijo...[Reply to comment]

Recuerdo haber visto uno de esos aparatitos de armar puchos durante mi primera infancia... sería de mi padre... tal vez estaba en mi casa.
Mi madre decía que mi padre se parecía a Bogart, por lo del pucho y el perramus..?
(De acá al diván de la psi derechito).

pd del posteo anterior: "al vida" = "la vida".

Atte. Lic. O.R.

Vale dijo...[Reply to comment]

Estuve en Inglaterra hace unos años y ahí son tan caros los cigarrillos que practicamente todo el mundo (nabos, cancheros, viejos, pelados, panzones, inventores, kiosqueros, etc etc) anda con la bolsita de tabaco y se los arma. Acá sí es más raro.